Para qué sirve un periodista en Internet

Según muchos, para poco, ya que el periodista institucionalizado como tal no hace nada en la Web que no pueda realizar otra persona. Según otros, para mucho, pero poco importa su origen profesional o no porque cada comunidad crea sus propios periodistas en función de sus necesidades informativas.

Creo que ni una cosa ni la otra. Compartir el rol de gatekeeper con la audiencia no implica darle al usuario medio de Internet la responsabilidad de elaborar periódicamente información actual y de calidad (lo de objetiva ni lo nombro porque afortunadamente, eso ya pasó de moda), obligación que sí tienen los que se dedican a esto profesionalmente.



Pero los que se vanaglorian de ser profesionales y quieren proteger su coto ante el intrusismo, deberían darse cuenta de que no hay mayor protección que trabajar bien. El público elige y es libre (y normalmente apto) para distinguir entre morralla y utilidad. Por eso si no te leen en la Red es porque alguien está contando lo mismo más rápido, más claro, más divertido, más útil, más interesante... o todo a la vez. No hay secretos.

Y ese "trabajar bien" en la Web incluye asumir los nuevos roles a los que debe enfrentarse el periodista, lo que implica trabajar con la audiencia en lugar de para. En otras palabras, aprender a gestionar y trabajar con los medios sociales (los protagonizados por y para la gente). Todo esto viene porque el editor de Digg (versión pionera de nuestro español Menéame), Mike Arrington, ha dicho que medios sociales como el suyo están transformando las rutinas periodísticas tradicionales:

La gente está comprendiendo cada vez más que los editores profesionales no son necesariamente los mejores para filtrar las noticias más importantes.

Lógicamente, Arrington cuenta la fiesta como más le conviene y la pone en los extremos, tal vez igual que harían David Sifry o Ricardo Galli, pero no le falta razón cuando apunta hacia el criterio social de la Red como nuevo órgano editorial de Internet. Tal y como predecía Jones,

La Web no le da importancia a las noticias, convierte en noticias lo que la gente busca [quien necesite la referencia exacta que me lo diga, la tengo por ahí].

Me encanta la frase porque ejemplifica a la perfección lo que supone esa "voz de la colmena". En definitiva, los roles periodísticos se desplazan de la simple producción de información a su diseño o arquitectura, o si se prefiere, a producir información sobre información. El ciberperiodista puede y debe asumir su papel de organizador de la inteligencia colectiva de la Red, de moderador de nuevos espacios públicos de debate y garante de fuentes informativas. Si no, otros lo harán por él y no habrá motivos para quejarse de intrusismo.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Muy bueno el artículo.